sábado, 8 de septiembre de 2018

Editorial

Ing, Carlos Tomassino
Presidente de FUNDESCO

     Como viejo docente (tantos años encima no me dejan ya decir como antes, “antiguo”), me permito escribir estas líneas editoriales para acompañar el gran esfuerzo que el Centro Interactivo (CIT de Fundesco) realiza en pos del deseo supremo de que la tecnología informática y la educación finalmente se confundan. Ello con el fin de que esta última, acompañe a aquélla en el ya avanzado nuevo siglo, para que nuestros jóvenes estudiantes (“millenials”, como se ha dado en llamárseles) adquieran las habilidades que - en tiempo de sus docentes -, no se requerían.
Desde el mismo momento de su creación, Sandra Sturla, con una fortaleza y un tesón inusitado, se ha puesto al hombro el propósito que el CIT de Fundesco sea un foro de acompañamiento al docente, para cumplir con ese anhelo de que la educación finalmente sea un acompañante eficaz de esa avasallante tecnología.
Y señalo que es la educación la que debe acompañar a la tecnología, y no al revés, ya que nuestros jóvenes aprendices traen desde su cuna el “know how” tecnológico, y se aburren cuando en los primeros tiempos los docentes queremos impartirles conocimientos con pizarrón, tiza y borrador.
Es por ello que Sandra y el reducido equipo que la acompaña, ha decidido enfrentar este desafío, y desde la Fundación para el Desarrollo del Conocimiento hemos creído que no sólo debemos animarla, sino darle todo el apoyo que se requiera en este tiempo de cambio.
Quisiéramos que muchos de ustedes, docentes de alma, se sientan atraídos por esta propuesta, nos acompañen, y juntos avancemos para el logro de una educación mejor, moderna y pujante, capaz de convertirse en arietes exitosos de ese cambio.
Lic Carlos Tomassino
Presidente de Fundesco