lunes, 30 de marzo de 2020

La preparación es la clave del éxito

Repentinamente el mundo cambió. De un día para el otro, los docentes no estábamos más en las aulas ni en la escuela. Y los estudiantes, tampoco. Las paredes que nos contenían, el piso que nos sostenía, el pizarrón, la tiza y los libros se esfumaron y, casi como por un hechizo maligno, fuimos transportados al mundo virtual.  Fue devastador. Para algunos más que otros, pero en definitiva fue un cambio abrupto que nos obliga a desempeñarnos en un espacio al que no estamos acostumbrados y con alumnos/as a los que, en general, no vemos ni percibimos. 

Es hora de recordar que esta situación fue repentina, que no tuvimos tiempo de prepararla y que vamos a llevar adelante nuestro trabajo “a pulmón”... como lo hicimos siempre pero un poco distinto. Debemos recordar que somos especialistas en educación y eso no cambia porque no sepamos manejar una videollamada o utilizar un aula virtual. Pensemos en todas las herramientas con las que contamos, pensemos en la diversidad de estrategias que podemos utilizar, y elijamos las que sabemos manejar mejor y nos resulten más cómodas. De a poco aprenderemos, a prueba y error, cuáles son las más apropiadas. Y también, de a poco, incorporaremos nuevas. Paso a paso…

¿Qué tenemos que tener en cuenta al momento de preparar nuestra clase virtual?

Que una clase virtual no es dar tarea. Debemos armar nuestro plan de clase con mucho cuidado, pensando en los recursos que el/la estudiante va a necesitar, no sólo para resolver las actividades, sino para  aprender. Esos recursos debemos proveerlos para que el/la alumno/a se desempeñe lo más autónomamente posible, tal vez seamos afortunados y cuenten con familiares o amigos que los puedan ayudar, pero no siempre es el caso.

También es importante pensar cómo vamos a comunicarnos con los estudiantes. Cómo y cuándo nos van a poder preguntar sus dudas, cómo y cuándo les vamos a responder. Por qué canales lo vamos a hacer? Emails? Whatsapp? La organización del tiempo durante la clase y fuera de la misma es esencial.

Durante el encuentro virtual…

Prácticos tips para tener en cuenta:

  • Algunos minutos antes del encuentro virtual, enviá un recordatorio. Así te aseguras que tus estudiantes van a estar conectados al empezar la clase. 
  • A su vez, además de saludarlos y darles una cálida bienvenida,  recordales qué elementos van a necesitar para la clase. De esa manera, los tendrán a mano.
  • Al comienzo de la clase, siempre es importante acordar las reglas de comunicación. Siempre es bueno, informarles cuántos participantes hay en la clase, para que tomen real dimensión del evento. Así como delinear cómo se va a llevar a cabo la clase, cómo se puede preguntar si tengo dudas (envío un icono, “levanto la mano”) , cómo puedo pedir la palabra sin interrumpir al otro.
  • Otro tip importante es ayudarlos a manejar la ansiedad. Seguramente, en diferentes momentos de la clase, algún/a alumno/a se retrase o se pierda, es esencial asegurarles que les vamos a ofrecer ayuda y los guiaremos para que puedan seguir adelante.
  • Darle la seguridad a los alumnos que los escucharemos, les daremos un espacio para que se expresen y los tendremos en cuenta si necesitan ayuda, es muy importante para bajar la ansiedad,para que se relajen y puedan disfrutar de la clase.
  • Para muchos docentes ésta es su primera experiencia en clases virtuales, así como sus primeros contactos con las TIC en educación,  por lo tanto es fundamental entender que los primeros encuentros serán “prueba y error” y habrá muchas cosas para ajustar. Es importante que entendamos esto pero también que lo comuniquemos a nuestros/as alumnos/as. De esta manera, evitaremos la frustración cuando se cometan errores, se desconecte la conexión, se pierda algún comentario… en fin, cuando las cosas no salgan tan bien como habíamos pensado.
  • Recordemos que la comunicación mediada por TIC no es igual a la comunicación presencial. Hay gestos, expresiones, tonos en la voz que no se aprecian de la misma manera, por lo que es muy importante tener cuidado con nuestra forma de expresarnos. Es útil recordar los tres pasos para dar una retroalimentación efectiva:  1° Resaltar algo positivo, reconocer el esfuerzo para mantener la motivación. Nunca empezar con una frase negativa. 2° Luego marcar el aspecto a mejorar o el error. 3° Ofrecer una sugerencia para mejorarlo.
  • Tener siempre presente quiénes son los estudiantes que están participando y quiénes no. Tratar de incorporarlos e incentivarlos para que participen.
  • Estar atentos y tratar de no dejar ninguna pregunta sin contestar o ninguna intervención de los estudiantes sin darle lugar. La clase es el momento que los/as estudiantes están esperando para poder ser escuchados. Los docentes debemos proporcionarles el espacio para que lo puedan hacer.
  • Al finalizar la clase, repasar el evento, tomando nota de los éxitos y de los puntos a mejorar. Es importante reflexionar para poder ir mejorando poco a poco el desarrollo del mismo. Recordemos que estamos en la etapa de prueba y error. Incorporar en esta reflexión a los alumnos/as nos ayudará muchísimo.

Recordemos que en la dificultad reside la oportunidad (A. Einstein).

Autora. Prof Sandra M. Sturla